Para que una empresa pueda trascender en el tiempo es necesaria la implementación de un Consejo de Administración que cuente no sólo con la fuerza y poder de gestión adecuados, sino con la visión estratégica necesaria para tomar las decisiones importantes que definan el rumbo y futuro de la empresa.
El consejero independiente tiene como objetivo principal el brindar a la empresa una visión externa que los dueños o quienes operan en el día a día no pueden percibir. Es aquél que expondrá al Consejo de Administración las fortalezas de la empresa, el que observará lo que nadie ha visto, preguntará lo que nadie ha preguntado y cuestionará cuando sea necesario, aportando el contrapeso necesario y oportuno que favorece el análisis, el diálogo, con el objetivo de guiar a la empresa por el rumbo más adecuado para lograr su trascendencia.
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